viernes, 22 de febrero de 2013

Fuegos artificiales


Fuegos artificiales
estallan en motas de polvo
en su mirada.
Su mente la habitan
las musarañas.
La boca entreabierta
intentando tragarse el cielo
en un silencio.
Por su cerebro gravitan
tristes recuerdos.
A miles de años luz
parece estar su cabeza
como una estrella.
Hay voces, fotografías
en sus retinas.
A cada segundo
la respiración mengua
como un cigarro.
Del corazón quedan
solo los posos.
El pálido cuerpo
naufraga en arena blanca
y muda la piel.